lunes, 15 de octubre de 2012

Un pueblo de cuento en Alemania

Una parada no programada en nuestro viaje por Alemania, nos dio la oportunidad de conocer un lugar que habríamos pasado por alto. Pero bien vale pasar unas horas aquí.

El pueblo de Oberammergau es tal como imagino que viviría Blanca Nieves, las casas pintorescas como en los cuentos te hacen alucinar sobre que sucede detras de cada puerta.

Las paredes son tradicionalmente pintadas al fresco con representaciones religiosas, naturales o los nombres de los dueños del lugar, dando un aura angelical. Lo que más me ha encantado es ver esas ventanas y balcones plagados de flores que le daban vida al día que nos había tocado, una lluvia torrensial nos dejo empadados, por no llevar paraguas, obviamente caímos en  la trampa de comprar uno muy caro, pero no teníamos otra opción, eso o seguir bajo la lluvia el resto del día.



Las calles del centro forman un paseo peatonal repleto de tiendas para turistas que ofrecen tax free. Aunque no compres puedes pasar el día observando los increíbles juguetes de madera, detallados con tal delicadeza que da miedo tocarlos.

Los cucús son otro elemento tradicional de zona, hay de todos tamaños, colores y precios.

Llegar es muy fácil, en tren, autobus o auto, desde Münich es aproximadamente 1 hora y media.